8 de junio

El 8 de junio de 2017, a los 73 años, Jaime “Gringo” De Lara falleció luego de luchar varios meses contra las consecuencias de un Accidente Cardiovascular que lo golpeó furtivamente en septiembre del año pasado.

Gracias a ser modelo de Marlboro, organizador de las competencias de carrovelismo en la Pampa del Leoncito, su faceta de inventor y también su paso como director de Turismo; lograron que el Gringo se convierta en un ícono sanjuanino.

A continuación, un repaso de la historia del Gringo publicada en El Nuevo Diario:

Jaime “Gringo” De Lara, nació el 22 de septiembre de 1944 en San Juan, tres meses antes del terremoto, hijo de Jaime De Lara y Celia Sánchez, mayor de 5 hermanos.

Sus estudios comenzaron en la Escuela Sarmiento, una escuela pre fabricada traída de Buenos Aires luego del terremoto.

Finalizo 6 sexto grado en la Escuela Alem. Terminando el secundario en el Instituto Superior de Arte ubicado en el parque.

Aficionado a la fotográfica, el motivo que más retrata, dado a sus viajes es la geografía sanjuanina, pero su verdadero gusto fotográfico es la foto documental.

Realizó los primeros ojos de gato (bandas reflectarias). Como tenían espacio para publicidad, empezó como Emporio Económico o Crush los compraban para regalar. Ese fue el primer invento-publicidad (dos de sus pasiones y ocupaciones, junto con la fotografía y las travesías en 4x4) con el que empezó a hacerme conocido cuando tenía 30 años, comenzando su carrera como publicista.

Impuso la gráfica con humor en grandes carteles, introdujo las primeras gigantografías, como la botella de vino para Montilla, que tenía 9 metros y giraba; y los carteles lumínicos de no doblar a la izquierda, que hizo con Cavic. Formó, con tres amigos, el primer grupo de Estancieras doble tracción, conocidas como Guanaqueras porque Julio Devoto los usaba para cazar, pero ellos sólo para ir a la montaña y sacar fotografías. Formó el primer club de rafting y la escuela y club de alas delta.


Ver artículos: La familia De Lara

GALERIA MULTIMEDIA