Uñac. El jornalero alicantino que dio a San Juan prominentes hombres públicos

Joaquín Uñac fue el primer Uñac en llegar a San Juan y establecerse en Pocito en 1911. El hombre fue un gran trabajador e impartió a sus hijos la defensa de estas tierras. Con los años, el nieto que llevó su nombre se convirtió en intendente y sus dos hijos fueron vicegobernadores: Rubén y Sergio Uñac. Este último, en las elecciones del año 2015, fue elegido gobernador de San Juan.

 Cuando Joaquín Uñac llegó a la Argentina en 1911, junto a su pequeño hijo Rafael de 9 años, nunca imaginó que en las generaciones posteriores habría en la familia dos intendentes, dos vicegobernadores y un gobernador.
Según el archivo de inmigración, aquel hombre había nacido en el pueblo de Sax, en Alicante, España. Arribó a América del Sur en el barco France, habiendo embarcado el primero de enero de 1911 en Valencia. De profesión jornalero, sus sueños eran muchos pero el principal era poder crecer económicamente en estas tierras y rehacer su vida tras la muerte de su esposa.
Cuando llegó a San Juan, al bajar del tren lo recibió un francés afincado que tenía varias bodegas en Cuyo y hacía crecer el sector agrícola. Emilio Langlois fue quien tomó a Joaquín, como a tantos inmigrantes, y lo llevó a trabajar con él a La Rinconada, Pocito.


El español fue capataz de bodega y gracias a su buena labor recibió, de manos del francés, una pequeña casa con una finquita. En ese lugar se casó en segundas nupcias con María Peñalba y tuvo cinco hijos más: Joaquina, Balbina, Adela, Suceso y Ramón.
En ese pueblo trabajó hasta los 70 años, siempre acompañado, en la labor, por su familia.
Las vueltas de la vida hicieron que allí su primer hijo, Rafael se casara con Josefa Castaño, una joven inmigrante española que había llegado en el mismo barco con él y que trabajaba también en la finca de Langlois. La unión religiosa fue el10 de mayo de 1924 (él tenía 22 y ella 20) y tuvieron cuatro mujeres y un varón. Este último no sólo daría continuidad al apellido sino que además marcaría la historia política de Pocito.


Con el cine Aberastain
 Joaquín, igual que el nombre de su abuelo, nació el 21 de febrero de 1938. “Coco”, como le decían los que lo querían, tuvo una infancia feliz y tranquila en La Rinconada. Allí hizo sus estudios primarios mientras su padre se dedicaba al trabajo del campo.
Cuando su abuelo se jubiló y su familia fundó el primer cine en Pocito, el Aberastain, todos se trasladaron a la villa cabecera del departamento para poder darle vida y continuidad a este emprendimiento.
Era la década del ‘30 y se vivía todo el esplendor del séptimo. Su padre Rafael pasaba largas horas trabajando en el lugar, mientras él crecía fascinado por la magia de la tecnología. Por su parte, su abuelo que vivió hasta los 90 años, custodiaba la puerta del cine sentado en una silla de madera, aferrado a un viejo bastón. Esa postal quedaría grabada en la familia para toda la vida.


Joaquín hizo parte de la secundaria en el colegio Don Bosco. Para ello, madrugaba bien temprano todos los días para tomar el primer micro que lo llevaba a la capital sanjuanina. Casualmente, ese mismo colectivo era el que tomaba la adolescente Dora Ene San Martín con sus hermanos, que también vivían en la Villa Aberastain, para estudiar ella en el colegio La Inmaculada y ellos también en Don Bosco.
Al principio cruzaban sonrisas tímidas, pero luego Joaquín se animó a hablarle y empezar una linda amistad que los llevó al altar. La época del noviazgo fue considerada por Dora como “hermosa” ya que se encontraban en la plaza para caminar a su alrededor, junto a una pareja de amigos, y cada tanto salían a bailar al club Aberastain.
El 6 de diciembre de 1962, pocos días después de que Dora se recibiera de maestra, se casaron en la iglesia de Santa Bárbara de Pocito. La fiesta fue en el mismo cine Aberastain, al aire libre, y la luna de miel fue en Córdoba y Catamarca.

En 1964 nació el primer hijo de la pareja, Rubén, quien vino a “llenarle de felicidad el hogar con sus ocurrencias”, según cuenta su mamá. Seis años después llegaría Sergio, el segundo hijo.
Como Dora y Joaquín pasaban largas horas trabajando, Rafael Uñac y su esposa se dedicaron a darles una mano en el cuidado de los niños, algo que agradecieron toda la vida.


De ferretero a intendente
Joaquín Uñac Castaño fue un hombre muy trabajador. A los 18 años, apenas egresado del colegio Don Bosco, obtuvo un puesto de empleado en el banco San Juan, sucursal Pocito. Allí se desempeñó por más de 10 años y en el último tiempo conjugó esta labor con la administración de una ferretería familiar, levantada con un hermano de Dora. 
En aquel lugar, el contacto con la gente era constante y, las anécdotas familiares recuerdan que, pasaba muchas horas hablando de las necesidades del pueblo. De a poco, y casi sin darse cuenta, fue entrando en el mundo de la política. Charla va, charla viene, conoció a punteros del Justicialismo, de la vieja escuela política, que lo fueron conquistando.

Varias veces recibió la propuesta de ser intendente de Pocito pero le costaba dar el sí. Fue el actual gobernador José Luis Gioja quien lo convenció para que se animara, a principio de la década del ‘90, Gioja era por aquel entonces diputado nacional y realizaba una fuerte militancia en el Justicialismo. La labor de él, más la perseverancia en los pedidos, hicieron que Joaquín aceptara la propuesta. En 1995 estaba la Ley de Lemas y el Frente de la Esperanza tenía varias listas armadas en Pocito. Jorge Escobar, quien era gobernador por aquel entonces, dijo que iba a apoyar a todos por igual, y José Luis Gioja le brindó su apoyo.

Los hijos de Joaquín, en ese tiempo trabajaron incansablemente para la candidatura de su padre. Como un militante más, salían todas las noches con amigos a pegar afiches y hacer pintadas propagandísticas. A su vez, Sergio se dedicó a recorrer el departamento con un altoparlante.

De esta  manera, el éxito estuvo con él y ganó casi de manera arrasante en las urnas.

En 1999 llegó la reelección y un nuevo triunfo. Pero las cosas ya no serían tan buenas. Su gestión se lucía pero la interna política lo enfrentaba a Oscar López, que era el presidente del Concejo Deliberante. El 15 de enero del 2003, Joaquín murió faltando pocos meses para llegar al final de su mandato, dejando a Pocito consternada por la noticia. López asumió el lugar de intendente y uno de los primeros en ser removidos por él, fue el hijo menor de Uñac, Sergio, que se desempeñaba como asesor legal.

Los hijos, vicegobernadores y gobernador
Rubén Uñac nació el 19 de marzo de 1964 y su hermano Sergio, el 15 de febrero de 1970. Ambos hicieron parte de sus estudios en la escuela Antonino Aberastain de Pocito y en el colegio Don Bosco de Capital. En la Universidad Nacional de Córdoba siguieron abogacía y tuvieron una activa participaron en grupos estudiantiles de aquella provincia.
Cuando su padre entró en la política, ellos veían su actividad desde lejos. Sin embargo cuando se recibieron, acompañaron activamente la labor de Joaquín.
Así fue como en octubre del 2003, Sergio se convirtió en intendente de Pocito, acompañando en la lista a José Luis Gioja para gobernador. En el 2007 renovó su cargo en el Ejecutivo y se convirtió en uno de los intendentes más votados en aquella elección.

Para esta última oportunidad, su hermano acompañó a Gioja en la vicegobernación, algo que llenó de orgullo a la familia Uñac. Hasta ese momento, Rubén había sido diputado nacional. Abogado desde 1991 y afiliado al justicialismo desde 1992, en la función pública fue asesor del diputado justicialista Blas Ochoa, colaborador de Gioja es su gestión como senador y secretario Administrativo de la Legislatura del 2003 al 2006. En 1996 fue convencional constituyente cuando se redactó la Carta Orgánica de Pocito y fue integrante del Consejo provincial del PJ. Como legislador nacional se sumó al bloque kirchnerista de la Cámara baja y asumió como vocal en siete comisiones permanentes.

Rubén está casado con Claudia Barceló y tiene dos hijos en edad escolar: Candelaria y Juan Ignacio.
En el 2011, le pasó el mando de la vicegobernación a su hermano Sergio, tras quedar electo en ese cargo acompañando en las elecciones a José Luis Gioja, que fue por su tercer mandato como gobernador. Con Gioja terminando éste último mandato, Sergio fue designado como su sucesor dentro del partido, y en las elecciones del año 2015 fue elegido gobernador de San Juan.  

Sergio Uñac está casado con Silvana Rodríguez y tiene tres hijos en edad escolar: Melania Agustina, Sergio Gonzalo y Facundo Agustín.

Ver Sergio Uñac: El hombre detrás del gobernador

     

GALERIA MULTIMEDIA
Joaquín “Coco” Uñac se casó con Dora Ene San Martin el 6 de diciembre de 1962. Fue en la iglesia de Santa Bárbara de Pocito. La fiesta fue en el cine Aberastain, al aire libre, y la luna de miel fue en Córdoba y Catamarca.
Joaquín “Coco” Uñac junto a su esposa Dora y sus hijos Sergio y Rubén. Según destacó Dora, en las reuniones familiares siempre se hablaba de política.
Los nietos de Joaquín “Coco” Uñac: Candelaria, Juan Ignacio, Melania Agustina, Sergio Gonzalo y Facundo Agustín.
Toda la familia junta en la década del ’90. Arriba parado a la derecha se puede ver a Joaquín “Coco” junto a su hijo Rubén, a pocos metros se encuentra Sergio. Abajo, también está el cantautor Mario Zaguirre, primo de los hermanos Uñac.
Rubén y Sergio Uñac juntos a su madre Dora Ene.
Joaquín y Dora con el pequeño Rubén, durante un viaje a la costa Atlántica.