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Fraifer: Profesionales y hockistas de origen libanés
La historia de estos Fraifer en Argentina comienza principios del siglo XX, con la llegada de Salomón Fraifer, un joven libanés que había quedado prácticamente a cargo de su madre y hermanos, luego de la muerte de su padre. Como muchos otros libaneses, en la provincia se dedicaron al comercio. Entre los hijos y nietos de esos inmigrantes hay destacados profesionales, varios avocados a la medicina. Además, esta familia tuvo un lugar importante en el hockey sobre patines, algunos de sus miembros estuvieron en los inicios del Club Olimpia y Miguel José “Cholo” Fraifer, que jugó en esa institución, llegó a ser un referente del deporte en todo el país.
Salomón Fraifer, el primero
Los relatos de los inmigrantes que llegaron a Argentina son historias de desarraigo, sacrificio y muchas veces están teñidos por conflictos y la pobreza económica de ciertas regiones. Así lo fue para los Fraifer, que llegaron al país aproximadamente en 1912. Venían desde el Líbano, de un pueblo llamado Kesronan. Allí vivían Miguel Fraifer y María Sefair junto a sus cinco hijos: Salomón, José, Victoria, Marta y Jorge. 
Miguel Fraifer, el padre de la familia, falleció cuando el menor de sus hijos tenía alrededor de un año. Después de eso, el mayor de los hermanos, Salomón, que entonces tenía 18 años, emprendió el viaje a Sudamérica.
Salomón Fraifer llegó a San Juan y comenzó a trabajar transportando y vendiendo mercadería, como también lo hacían muchos de sus paisanos. La compraba en la ciudad para después llevarla a caballo hasta Calingasta. Eran viajes que duraban casi un mes y que podía emprender cuando no hacía tanto frío. Allá intercambiaba la mercadería por cueros de animales y luego los llevaba a la curtiembre para venderlos. Con ese trabajo logró reunir el dinero para traer a uno de sus hermanos, José, que al llegar se dedicó al ramo de verdulería y carnicería.
Había pasado poco más de un año desde la llegada del segundo de los hermanos Fraifer, cuando en el Líbano murió su madre, María Sefair. Los tres hijos más chicos, Victoria, Marta y Jorge, que tenía apenas diez años, quedaron huérfanos. Vivían una situación muy difícil y en 1914 se vinieron a Argentina. 
Jorge, el menor de los cinco hermanos, fue un tiempo a la primaria, aprendió el español y empezó a trabajar. Fue ayudante de la tienda Fagale y Mattar hasta que se casó y luego, junto a su hermano mayor Salomón, comenzaron a hacer trabajo ambulante, vendiendo ropa y telas. Iban casa por casa. Salomón falleció primero y su hermano continuó con el trabajo ambulante hasta que murió. Juntos compraron la casa que está ubicada en la esquina de Brasil y Mendoza, donde hoy trabajan los nietos e hijos de Jorge.
La familia y el hockey
Los libaneses tuvieron un papel importante en el desarrollo del hockey sobre patines de la provincia. La Sociedad Juventud Libanesa creó el Club Atlético Libanés, donde se podía practicar patinaje, entre otras actividades deportivas. Fueron también un grupo de familias de esta colectividad, los Luz, los Fraifer, los Dorgan y los Daroni, las fundadoras del Club Olimpia, después del terremoto de 1944. En esa institución comenzó su carrera deportiva Miguel José “Cholo” Fraifer, hijo de José Fraifer Sefair, que llegó a integrar el primer equipo de la selección argentina que jugó un campeonato mundial, en 1960. Jugó tres mundiales y fue uno de los jugadores que ayudó a posicionar el hockey argentino en el mundo. También jugaron en Primera división su hermano César y su primo José Julio Freifer, todos en Olimpia.
Los Fraifer y los Dorgan
De los cinco hermanos Fraifer Sefair el mayor, Salomón, fue soltero. Victoria se casó con un paisano que vivía en Mendoza, José Jalil y se radicó allá. Mientras que Marta se casó con Emilio Zaiden y no tuvo hijos.
Los otros dos hermanos, José y Jorge, se casaron con dos hermanas, hijas de Félix Dorgan y Sara Bacha. Ese matrimonio también venía del Líbano. Se habían instalado en Angaco, donde trabajaban como abastecedores de carne y tuvieron ocho hijos: Amalia, Antonio, José, Elías, Elisa, Juan, Luisa y Julio. José se casó la mayor y Jorge con Elisa.
José y Amalia tuvieron seis hijos:
* María Amalia, que ya falleció y tuvo dos hijos: José Luis González, comerciante, y Héctor Miguel González, que es sacerdote.
* Sara, que falleció a los dos años.
* Waded, que era docente y falleció.
* Miguel José ha sido jugador de hockey sobre patines y uno de los referentes del Club Olimpia. Ahora vive en Tandil, donde tiene una distribuidora de bebidas y tiene tres hijas: Sandra, que es médica; Claudia y Yanina, que son comerciantes.
* Elisa, que vive y no tuvo hijos.
* César fue enólogo, ya falleció, y tuvo a: José Aníbal, que es abogado; César Abel, que juega al hockey sobre patines, es técnico y fue arquero de la selección argentina y Eugenio, que es empleado bancario.
Por otra parte, Jorge y Elisa tuvieron seis hijos:
* José Julio, que fue médico cardiólogo y falleció. Tuvo tres hijos: Rubén Omar, que es médico cardiólogo; Patricia Susana, que es odontóloga, y Jorge Javier, que es comerciante.
* Norma, que ha sido maestra, vive en Mendoza y tiene tres hijos: Graciela Noemí Carrió, que es arquitecta y vive en San Juan; Marcelo Edgar Carrió, que trabaja en el rubro cartelería y Enrique Carrió, que es contador y empresario, los dos varones viven en Mendoza.
* Adela, que ha sido maestra y tuvo dos hijos: Ana Carina Luque, que es abogada, y Fabián Armando Luque, que es kinesiólogo.
* Nora Cristina, que fue maestra jardinera y falleció.
* Los mellizos Jorge, que es odontólogo, y María Elisa, que ha sido maestra y profesora de Geografía. Jorge tuvo tres hijos: Jorge Adrián, que es odontólogo; María Verónica, que es nutricionista, y Gonzalo Andrés, que es odontólogo. Elisa es madre de: Marcela Becerra, contadora; Vanesa Becerra, profesora de Educación Física y Guillermo Becerra, ingeniero industrial.
Ver artículo:
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